No importa si eres un estudiante de primaria, secundaria o de universidad, la atención en las clases juega un papel muy importante en el rendimiento académico. Es por ello que te enseñamos algunas claves para mejorar la atención en clase, para que no se hagan tan aburridas y estudies menos.

Ubicación y comportamiento en el aula
Aunque no lo parezca, algo que puede influir mucho en su rendimiento durante las clases, es dónde te sientas en el aula. Por lo tanto, es recomendado seguir estas recomendaciones:
- Sentarse lejos de la ventana – Estas son una gran fuente de distracción, pues te darán algo que ver que no sea la clase.
- Elegir un puesto céntrico – Lo mejor es evitar las primeras y últimas filas, así como los extremos del aula. Si estás en el centro, podrás ver toda la pizarra y lo escrito en ella sin tener que levantarte o preguntar a otros.
- Alejarse del grupo de amigos – Sin duda es lo mejor que puedes hacer, pues ellos son tu principal fuente de distracción y viceversa.
- Apagar el móvil – Aunque pueda parecer algo molesto, si pierdes la concentración con facilidad, esta será una de las fuentes de distracción más grandes.

Preparación preliminar
Una técnica que no muchos conocen para mejorar la atención en clase, es prepararse el día anterior haciendo una lectura ligera del tema a tratar en la clase, siempre que sea posible.
Lo principal es crear un sentido de la curiosidad para la clase a tomar. Sin embargo, también puede ayudar a crear dudas en el estudiante que solo podrá responder durante la clase o haciendo preguntas directamente a los profesores.
Si estás corto de tiempo, incluso puedes hacerlo un par de horas antes de la clase.
Tomar notas correctamente
Una de las fallas que comenten la mayoría de estudiantes, es tomar notas de forma incorrecta durante la clase. Si es que toma notas, en general suelen escribir todo lo que está en el pizarrón o lo dictado por el profesor sin prestar demasiada atención o análisis.
Sin embargo, lo más recomendado es realizar pequeños resúmenes o síntesis de lo que lee en la pizarra, para así captar mejor la información escrita.
De la misma forma, es importante prestar atención a lo que dicen los profesores, aún cuando no están dictando, pues siempre pueden dar tips o consejos que no están en los libros.
Finalmente, trata de escribir pequeñas notas importantes o dudas en los márgenes, para no olvidarlas.

Descansar lo más posible
Siempre que sea posible, es necesario descansar antes de una clase, ya que el cansancio es el peor enemigo de la mente.
Aún sin no te sientes con sueño al día siguiente, estar cansado hará que tus habilidades cognoscitivas no estén al 100%, por lo que no serás capaz de asimilar la información de la clase y será más fácil que te distraigas.
La cafeína no es buena
Teniendo esto en mente, muchos recurren a la cafeína para mantenerse alerta, ya sea con café o con bebidas energéticas. Sin embargo, esto es un terrible error, pues el efecto es de corta duración y, una vez pase, te sentirás mucho peor que antes. Además, mientras más cafeína consumas, más necesitaras para obtener el mismo efecto.
Ser capaz de asimilar bien la información explicada durante las clases puede ayudar a un estudiante a estudiar menos a la hora de prepararse para un examen. Por ello, te invitamos a aplicar estas técnicas para mejorar la atención en clase.
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